En este artículo, vamos a hablar del Cachopo Asturiano, su historia, sus ingredientes y su preparación. También compartiremos algunos consejos para preparar el mejor Cachopo Asturiano que hayas probado.
Qué es un Cachopo Asturiano
El Cachopo Asturiano es un plato típico de la cocina asturiana que se ha convertido en uno de los platos más populares de la gastronomía española. Se prepara con dos filetes grandes de ternera, jamón serrano y queso asturiano. Los filetes se rellenan con el jamón y el queso y se fríen en aceite caliente hasta que estén dorados.
La palabra «Cachopo» viene del asturiano «caxopu», que significa «tajada grande». Es un plato contundente y muy sabroso que se sirve caliente y suele acompañarse de patatas fritas o ensalada.
Origen del Cachopo Asturiano
El origen del Cachopo Asturiano no está claro, aunque se cree que puede remontarse al siglo XIX. En aquella época, los pastores asturianos llevaban consigo filetes de ternera, jamón serrano y queso asturiano para alimentarse durante sus largas jornadas de trabajo en el campo.
Con el tiempo, los cocineros asturianos empezaron a rellenar los filetes con el jamón y el queso y a freírlos en aceite caliente. Así nació el Cachopo Asturiano tal y como lo conocemos hoy en día.
El cachopo asturiano ha de capturar la esencia de la gastronomía asturiana. Prepáralo con cuidado y respeto por la tradición. Obtendrás una verdadera obra maestra culinaria.
La clave para un cachopo excepcional reside tanto en la calidad de los ingredientes como en la técnica de preparación. Con paciencia y atención a cada detalle, es posible crear un plato que no solo deleite el paladar, sino que también rinda homenaje a la rica tradición gastronómica de Asturias.
Al servir el cachopo, es común verlo como el protagonista de la mesa, donde su crujiente exterior dorado da paso a capas de tierna ternera, jamón sabroso y queso fundido, creando una experiencia culinaria inolvidable. En sidrería Casa Marisa te pondrán un buen cachopo al estilo tradicional asturiano.
Sigue nuestros consejos y dedica el tiempo necesario a cada paso del proceso. Aunque parezca un plato sencillo, no lo es. Solo cuidando cada detalle conseguirás un plato con una combinación de texturas y sabores que haga que valga la pena cada esfuerzo.
Ingredientes del Cachopo Asturiano y su Selección
Además de los ingredientes, has de saber el valor nutricional y grasas del plato. Lee este artículo hasta el final para conocer estos detalles.
Para preparar un cachopo asturiano excepcional, necesitarás los siguientes ingredientes:
Filetes de ternera: El corazón del cachopo son dos grandes filetes de ternera, preferiblemente de la parte del lomo, que deben ser tiernos y jugosos. Es esencial que los filetes sean de alta calidad, bien golpeados hasta alcanzar un espesor de unos 5 mm, para garantizar su ternura tras la cocción.
Jamón serrano: Opta por un jamón de buena calidad, con un equilibrio perfecto entre grasa y carne, que aporte sabor sin dominar el conjunto.
Queso: Tradicionalmente, se utiliza queso asturiano, como el Afuega’l pitu o Cabrales, aunque otros quesos como el Manchego pueden funcionar bien. Debe ser un queso con carácter, que funda bien.
Huevos y pan rallado: Para el empanado, selecciona huevos frescos y pan rallado crujiente. Algunos prefieren hacer su propio pan rallado para un toque casero y único.
Aceite de oliva: Para freír, usa un aceite de oliva de calidad que soporte bien altas temperaturas.
Fases previas de preparación del Cachopo Asturiano
1. Aplanar los filetes: Coloca los filetes entre dos hojas de plástico de cocina y, con un mazo de carne, golpéalos suavemente hasta alcanzar el espesor deseado. Esto no solo ayuda a que el cachopo sea más manejable al comer, sino que también asegura una cocción uniforme.
2. Rellenar: Coloca una capa de jamón serrano sobre uno de los filetes, seguido de una generosa cantidad de queso. Cubre con el otro filete, como si estuvieras haciendo un sándwich gigante. Es importante presionar bien los bordes para sellar el relleno.
Cómo Cocinar el Cachopo Asturiano
1. Empanado: Bate los huevos en un plato hondo. Sazona los filetes rellenos con sal y pimienta. Pásalos primero por harina, sacudiendo el exceso, luego por el huevo batido, y finalmente, cúbrelos completamente con pan rallado. Asegúrate de que el empanado cubra bien todo el cachopo, sellando los bordes para que el queso no se escape durante la cocción.
2. Fritura: Calienta una buena cantidad de aceite de oliva en una sartén grande o en una freidora a una temperatura de 180°C. El aceite debe estar lo suficientemente caliente como para que al introducir el cachopo, este comience a freírse inmediatamente, sellando el exterior y conservando todos los jugos y el queso fundido en su interior. Fríe el cachopo hasta que esté dorado y crujiente por ambos lados, lo que suele tomar unos 4 a 5 minutos por lado, dependiendo del tamaño. Es crucial no sobrecargar la sartén y mantener la temperatura del aceite, para evitar que el cachopo absorba demasiado aceite y se vuelva grasiento.
3. Servir: Una vez frito, coloca el cachopo en papel absorbente para eliminar el exceso de aceite. Sírvelo caliente, acompañado de guarniciones tradicionales como patatas fritas, pimientos del Piquillo, o una ensalada fresca para equilibrar la riqueza del plato.
Consejos para un Cachopo Perfecto
Calidad de los ingredientes: No se puede enfatizar lo suficiente la importancia de seleccionar ingredientes de alta calidad. La ternera debe ser tierna, el jamón con un sabor profundo y el queso capaz de aportar ese toque cremoso sin sobrepasar los demás sabores.
Temperatura del aceite: Mantener el aceite a una temperatura constante es crucial para evitar que el cachopo absorba demasiado aceite y se vuelva grasoso. Un termómetro de cocina puede ser un gran aliado en este proceso.
Tiempo de reposo: Una vez empanado, dejar reposar el cachopo durante unos minutos antes de freírlo puede ayudar a que el empanado se adhiera mejor y no se despegue durante la cocción.
No sobrecargar la sartén: Cocinar el cachopo en una sartén donde pueda flotar libremente garantizará que se cocine de manera uniforme y adquiera ese color dorado perfecto por todas partes.
Presentación y Acompañamientos
Aunque el cachopo por sí mismo es un plato bastante completo, la elección de los acompañamientos puede elevar aún más la experiencia. Las patatas fritas caseras son un clásico que nunca falla, pero también puedes optar por una ensalada verde fresca para aportar un contraste ligero al plato. Los pimientos del Piquillo asados pueden añadir un dulzor suave que complementa perfectamente los sabores ricos del cachopo. En cuanto a la presentación, cortar el cachopo en diagonal antes de servir no solo facilita su degustación, sino que también permite apreciar las capas de carne, jamón y queso, haciendo la experiencia aún más apetecible.
Nutrientes y Grasas en el Cachopo Asturiano
1. Proteínas: La ternera y el jamón ofrecen una excelente fuente de proteínas de alta calidad, esenciales para la construcción y reparación muscular, así como para funciones corporales importantes.
2. Grasas: El cachopo contiene una cantidad significativa de grasas, tanto saturadas como monoinsaturadas, provenientes de la carne, el queso y el aceite utilizado para freír. Las grasas saturadas deben consumirse con moderación, mientras que las monoinsaturadas son más saludables para el corazón.
3. Calorías: Dado su tamaño y los métodos de cocción (empanado y frito), el cachopo es un plato de alto contenido calórico. Es importante considerar el tamaño de la porción y la frecuencia con la que se incluye en la dieta.
4. Vitaminas y Minerales: Además de las proteínas y grasas, el cachopo aporta vitaminas y minerales presentes en sus ingredientes cárnicos, como vitaminas del complejo B, hierro, zinc y fósforo, importantes para la salud del sistema nervioso, la formación de glóbulos rojos y la función inmune.
Consideraciones para un Cachopo más Saludable
1. Elección de ingredientes: Optar por cortes de ternera magros y quesos con menor contenido graso puede ayudar a reducir el contenido total de grasas saturadas del plato.
2. Método de cocción: Aunque tradicionalmente el cachopo se fríe, experimentar con métodos de cocción alternativos como el horno, puede ser una manera de disfrutar de este plato reduciendo su contenido graso y calórico.
3. Tamaño de la porción: Dada la densidad calórica del cachopo, servir porciones más pequeñas acompañadas de guarniciones ligeras como ensaladas frescas o verduras al vapor puede ofrecer un balance más saludable.
4. Moderación en el consumo: Disfrutar del cachopo como una indulgencia ocasional dentro de una dieta diversa y equilibrada permite apreciar este plato sin comprometer la salud nutricional general.